Por fin libres

Hoy ya pueden salir una hora los niños. Poco a poco se acaba la pesadilla, por lo menos la peor parte.

Solo se puede ir a un kilómetro de casa, pero en nuestro caso ya nos permite llegar a la naturaleza, la mejor maravilla en esta época.

No hay nada como disfrutar tranquilamente de la naturaleza

El aire primaveral con sus paisajes son un auténtico placer. De aquí a poco ya llegarán los primeros calores y personalmente ya no disfruto tanto, pienso en agua fresca y no es tan agradable caminar fuera de la sombra.

Sentarse en un prado o directamente tumbarse y escuchar los pájaros, sentir la brisa y dejar la mente libre.

Bosque lleno de sonido y fragancia primaveral

Demasiado tiempo en casa, sin aventuras que contar, la inspiración y la creatividad se reduce a 4 paredes. Para los que vivimos la naturaleza, ansiamos libertad de movimiento para seguir descubriendo cosas, volver a lugares que nos resultan mágicos. Cada día es una aventura, los lugares están vivos y tu actitud hacía ellos también es diferente. La intensidad de la luz multiplica las versiones de cada lugar, porque cada momento es único y no vuelve, pero vivirás muchos que te recordarán a ese momento.

Conversar tranquilamente con quién se cruza en tu camino, le aporta valor a tu paso por la vida, nuevos conceptos y puntos de vista para multiplicar infinitamente las posibilidades.

El camino dela agua, lleno de caprichosas curvas…

A disfrutar el Domingo en estos tiempos en que uno pierde la noción del tiempo, pero el paisaje no engaña y te recuerda que este no se detiene jamás. Vive tu momento y disfruta lo que puedas, ese instante ya no se repite, esta primavera no volverá, no se puede robar el tiempo. Libertad que si que ha sido condicionada, nada volverá a ser como antes, pero el tiempo seguirá su curso independientemente.

La naturaleza agradece nuestro descanso, pero no podemos dejar nuestro vínculo con ella…

Mantener la calma

Fácil decirlo, pero cada un lo lleva cómo puede. Esta situación esta en todas partes, me limita a escaparme y eso no me gusta.

No poder aislarme, ni escaparme me hace acumular rabia.

No era el momento adecuado para mí, pero creo que esto va a venir bien a la sociedad para tener los pies encima de la tierra. Las epidemias son una selección natural, siempre han existido y son necesarias. Nosotros no sabemos regularnos, tenemos un concepto de propiedad muy grande, nos gusta ser lo reyes de este planeta, pensar que todo lo dominamos.

Sinceramente la muerte no me da miedo, me asusta sufrir, porqué yo he venido a este mundo para estar de veraneo. Pasarlo bien, disfrutar, conversar, ayudar al que lo necesite en mi camino.

Necesito libertad, las paredes me atrapan en un mundo que está perdiendo el Norte. No se puede centrar todo el pensamiento en una cosa. Es una obsesión mala, porque si no puedes hacer nada por un problema, ya no lo tienes, si puedes hacer, pues haz lo que haga falta.

Solidaridad, responsabilidad, sentido de país…

Que mal me suena todo esto, llamarme egoísta pero esos que me piden, jamás han empatizado conmigo ni han tenido el más mínimo interés.

Somos números, como la economía. Muchas cifras, pero el sentimiento es poco cuando el círculo se hace grande.

Hay gente muy identificada con la sociedad, yo siempre fui un bicho raro muy adaptado y con curiosidad por saber y conocer de verdad a las personas. Observar, escuchar, entender.

Quiero ser libre
Se acaba la pesadilla
Despierta del sueño…

Jornada de reflexión

Buenas vistas para reflexionar

Un poco saturado de mirar mapas, pasará lo que tenga que pasar…

Este es un temporal que no se pueden ver cada año, otra cosa es lo que cada una entienda por temporal. Hay que se consciente de donde vivimos y escuchar a los que saben del tema y tiran de estadísticas no de sensaciones.

Yo como aficionado a la meteorología lo voy a vivir a tope, pero hoy necesito un poco de descanso, son ya muchos días esperando este cambio de tiempo, ahora ya espero pacientemente a disfrutar, cuando todo pase ya se harán valoraciones.

Rutas para disfrutar

Pero no sólo es por la meteorología que estoy de jornada de reflexión. Hoy se puede decir que me encuentro normal, pero esa normalidad suele ser previa a la euforia o la ira. Es tan difícil ser regular, somos humanos por mucho que a veces no lo creamos. Nosotros hemos inventado las estadísticas, pero cada día es diferente, cada momento es único. A veces puedes tener la sensación de que el momento que estás viviendo ya lo has vivido. Por muy monótono que no parezcan a veces algunos momentos, no todo es exactamente igual.
Puedes sonreír en el momento que socialmente no toca, te diviertes en un momento que no deberías hacerlo, en cambio te aburres en otro que deberías estar muy entretenido. Queremos planificar hasta nuestros sentimientos y sensaciones, pero eso no tiene lugar en ninguna agenda personal.

Si hoy te sientes alegre, disfruta ese momento, no te sientas mal, es tú momento. Sentimientos y realidad no van siempre unidos. Ya se suele decir que la vida son 4 días y es posible que 3 de ellos no tengan foto.
Momentos inesperados, en que la realidad supera a la ficción. Te preguntas si eso es la felicidad, pero ya sabes bien que no puede ser tan intensa, no puedes vivir en esa nube. Vuelve a bajar a la tierra, vuelve a tu camino y no olvides que puedes tropezar y arrastrarte por el barro.

Por esos momentos no tan buenos, te toca disfrutar de esos destellos de felicidad aunque a nivel social no toque. El pensamiento es libre y los sentimientos no entienden la razón.

Disfruta con pasión lo que te hace sentir bien